Gas Natural y aerotermia: la combinación ideal

La combinación del uso residencial del gas natural y la aerotermia puede mejorar en una letra la calificación de eficiencia energética de una vivienda.

La climatización híbrida, ¿es posible?

Si.  De hecho, tanto en proyectos de nueva edificación como en vivienda ya construida, la incorporación del gas natural a sistemas de aerotermia permite corregir todas las deficiencias y limitaciones de estos últimos. El gas natural eleva el grado de eficiencia y mejora el confort de los inquilinos en las diferentes situaciones climáticas que se viven en la Comunidad de Madrid a lo largo del año. Por ello, es oportuno analizar cómo un planteamiento híbrido entre gas natural y aerotermia puede ser una opción muy viable para muchos hogares.

¿Por qué combinar el gas natural con la aerotermia?

La climatización por aerotermia se basa en la transferencia de energía en forma de calor de unos entornos a otros, fundamentalmente aire, agua o suelo. Por sí sola tiene importantes carencias y problemas, como en el caso de los costes de inversión (más altos), en su ciclo de vida (más corto) y en garantizar un suministro permanente en el caso de las temperaturas extremas que se registran en época invernal en la Comunidad de Madrid.Lo mismo sucede en lo que respecta al mantenimiento, más elevado en el de la aerotermia, o a los problemas de ruido, espacio o afectación estética, sobre todo en fachadas. La dependencia de la electricidad, con sus considerables alteraciones en los precios y cortes de suministro provocados por los picos de potencia en el arranque, resulta también un obstáculo para mantener su eficiencia a bajas temperaturas. Sin embargo, en combinación con el gas natural puede ofrecer al consumidor la respuesta idónea a todos los niveles: consumo, sostenibilidad, rendimiento e integración con viviendas y edificios.

 

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